| 1 | Hay un mal que he visto en esta vida y que abunda entre los *hombres: | |
| 2 | a algunos Dios les da abundancia, riquezas y honores, y no les falta nada que pudieran desear, pero es a otros a quienes les concede disfrutar de todo ello. ¡Esto es absurdo, y un mal terrible! | |
| 3 | Si un hombre tiene cien hijos y vive muchos años, no importa cuánto viva, si no se ha saciado de las cosas buenas ni llega a recibir sepultura, yo digo que un abortivo vale más que él. | |
| 4 | Porque el abortivo vino de la nada, y a las tinieblas va, y en las tinieblas permanecerá anónimo. | |
| 5 | Nunca llegará a ver el sol, ni sabrá nada; sin embargo, habrá tenido más tranquilidad que el | |
| 6 | que pudo haber vivido dos mil años sin disfrutar jamás de lo bueno. ¿Y acaso no van todos a un mismo lugar? | |
| 7 | Mucho trabaja el hombre para comer, pero nunca se sacia. | |
| 8 | ¿Qué ventaja tiene el sabio sobre el *necio? ¿Y qué gana el pobre con saber enfrentarse a la vida? | |
| 9 | Vale más lo visible que lo imaginario. Y también esto es absurdo; ¡es correr tras el viento! | |
| 10 | Lo que ahora existe ya ha recibido su *nombre, y se sabe lo que es: *humanidad. contra alguien más fuerte. | |
| 11 | Aumentan las palabras, aumentan los absurdos. ¿Y qué se gana con eso? | |
| 12 | En realidad, ¿quién sabe qué le conviene al hombre en esta breve y absurda vida suya, por donde pasa como una sombra? ¿Y quién puede decirle lo que sucederá en esta vida después de su muerte? | |